«Queridos hijos, nuevamente los invito a vivir mis mensajes con humildad. Especialmente den testimonio de ellos, ahora que nos acercamos al Aniversario de mis apariciones. Hijitos, sean un signo para aquellos que están lejos de Dios y de Su amor. Yo estoy con ustedes y los bendigo a todos con mi bendición maternal. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!»