“Queridos hijos, este es el tiempo del agradecimiento. Hoy de ustedes busco el amor, no busquen errores y equivocaciones en los demás y no los juzguen. Busco de ustedes que amen, que difundan la verdad; ¡porque la verdad es eterna, es inmutable y siempre actual! Lleven la luz de mi Hijo, de este modo destruirán las tinieblas que, siempre cada vez más, quieren aferrarlos y conducirlos lejos de mi Hijo Jesús. No tengan miedo, yo estoy con ustedes. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!”
