(InfoMedjugorje – 13/3/2020) – Marija Pavlovic envió al Papa un mensaje en que la Virgen alienta su acción en favor de la Paz.
El 30 de noviembre de 1983 pidió que se enviase una relación que subrayara la urgencia del mensaje. El padre Tomislav Vlasic escribió a la Santa Sede:
“Después de las apariciones de la Virgen, con fecha 30 de noviembre de 1983, la vidente Marija Pavlovic vino decirme: La Virgen dice que es necesario informar inmediatamente al Soberano Pontífice y al Obispo de la urgencia y la gran importancia del mensaje de Medjugorje.
Esta carta pretende ser cumplimento de este deber.
1. Cinco videntes: Vicka Ivankovic, Marija Pavlovic, Ivanka Ivankovic, Ivan Dragicevic y Jacov Colo, tienen todos los días una aparición de la Virgen. La experiencia a través de la cual la ven, es un hecho comprobable con observaciones directas; aún más, ha sido filmada.
Durante las apariciones los videntes reaccionan a la luz, no perciben los ruidos, no reaccionan si alguien les toca, se sienten fuera de espacio y del tiempo.
Todos los videntes declaran en sustancia:
Vemos a la Virgen como a las demás personas. Rezamos con Ella, hablamos y podemos hasta tocarla. La Virgen dice que la paz en el mundo está en crisis. Invita continuamente a la reconciliación y a la conversión del corazón. Nos ha prometido dejar un signo visible en el lugar de las apariciones, en Medjugorje, para todos la humanidad. El tiempo que precede a este signo visible es un período de gracia para la conversión y para profundizar en la fe.
La Virgen ha prometido confiarnos diez secretos. Hasta ahora, 8 han sido revelados a Vicka Ivankovic y a Marija Pavlovic (que ha recibido el noveno, el día 9 de diciembre de 1983), 9 a Jakov Colo, a Ivan Dragicevic e Ivanka Invankovic; 10 secretos sólo a Mirjana Dragicevic.
Estas apariciones son las últimas de la Virgen sobre la tierra. Por esta razón son tan largas y frecuentes.
2. La Virgen ya no se aparece a Mirjana Dragicevic. Su última aparición cotidiana la tuvo el día de Navidad de 1982. Después las apariciones para Mirjana cesaron, excepto el día de su cumpleaños (18/3/1983) como Mirjana había preanunciado conforme a la promesa que le hizo la Virgen.
Durante la aparición del 25 de diciembre de 1982, según Mirjana, la Virgen le confió el décimo secreto y le reveló las fechas en que se habrían de verificar los diversos secretos. La Virgen ha revelado a Mirjana muchos aspectos del porvenir; hasta ahora más de lo revelado a los demás videntes. Por esto informo de lo que Mirjana me dijo en el diálogo que tuve con ella el 5 de noviembre de 1983.
Resumo los aspectos esenciales de su narración, sin citar al pie de la letra; Mirjana dice:
Antes de la señal visible que se dará a la humanidad, habrá tres avisos para el mundo. Los avisos serán tres acontecimientos que sucederán en la tierra.
Mirjana será testigo de ellos. Tres días antes de uno de los avisos, informará a un sacerdote de su elección. El testimonio de Mirjana será una confirmación de las apariciones y una invitación a la conversión del mundo. Después de los avisos vendrá el signo visible en el lugar de las apariciones, en Medjugorje, para toda la humanidad. El signo será dado como testimonio de las apariciones y como una invitación a la fe.
El noveno y el décimo secreto son graves, son un castigo por los pecados del mundo. El castigo es inevitable porque no podemos esperar, al parecer, la conversión del mundo entero. El castigo se puede atenuar por medio de oraciones y penitencia, pero no puede ser evitado. Un mal que amenazaba al mundo, según el séptimo secreto, ha sido mitigado gracias a la oración y al ayuno. Por eso la Virgen continúa invitándonos a la oración y el ayuno: ‘Han olvidado que con las oraciones y el ayuno pueden alejar la guerra y suspender las leyes naturales’.
Después del primer aviso, los otros seguirán en breve tiempo. Así, los hombres tendrán tiempo para convertirse. Este tiempos es período de gracia y conversión. Después de la señal visible, los que queden con vida tendrán poco tiempo para convertirse. Por esto, la Virgen, llama a la conversión urgente y a la reconciliación.
La invitación a la oración y a la penitencia está destinada a la alejar los males y la guerra, pero sobre todo a salvar almas.
Según Mirjana, nos encontramos cercanos a los acontecimientos predichos por la Virgen. En nombre de esta experiencia, Mirjana dice a la humanidad: ‘¡Conviértanse pronto, abran sus corazones a Dios!’.
Además de este mensaje esencial, Mirjana dice que ha tenido en 1982 una aparición de la Virgen que, en opinión nuestra, echa luz sobre la historia de la Iglesia. Ella cuenta una aparición en la cual Satanás le pidió renunciar a la Virgen y seguirlo a él, que le haría feliz en el amor y en la vida; en cambio con la Virgen tendría que sufrir. Mirjana rechazó la propuesta. Cuando se le apareció la Virgen, Satanás se fue. Entonces la Virgen le dio a Mirjana este mensaje:
`Discúlpame por lo que te ha ocurrido, pero era necesario que tu supieras que Satanás existe. Un día se presentó delante del trono de Dios y le pidió permiso para poner a prueba a la Iglesia durante un período. Dios le permitió que lo hiciera durante un siglo. Este siglo está bajo el poder del demonio, pero cuando se realicen los secretos que les han sido confiados a ustedes, su poder será destruido. Ya desde ahora él ha empezado a perder su poder y por eso se ha puesto agresivo: destruye matrimonios, provoca divisiones entre los sacerdotes, crea obsesiones y asesinatos. Ustedes tienen que protegerse con la oración y el ayuno; sobretodo, la oración comunitaria. Lleven consigo objetos benditos, colóquenlos en sus casas y vuelvan al uso del agua bendita`.
Según ciertos expertos católicos que han estudiado estas apariciones -sigue diciendo la carta de los videntes al Santo Padre- este mensaje de Mirjana explicaría la visión que tuvo el Sumo Pontífice León XIII. Según ellos, León XIII, después de haber visto en una visión apocalíptica el futuro de la Iglesia, introdujo la oración a San Miguel; oración que los sacerdotes rezaban después de la Misa hasta el Concilio. Estos expertos dicen que se está acabando el siglo de pruebas vistas por el Sumo Pontífice León XIII.
Santísimo Padre, no quiero ser responsable de la perdición de nadie… Yo hice lo mejor que pude; el mundo está invitado a la conversión y a la reconciliación . Escribiendo a Su Santidad, he cumplido con mi deber.
Después de haber redactado esta carta, la entregué a los videntes para que ellos preguntaran a la Virgen si el contenido era exacto. Ivan Dragicevic me trajo esta respuesta: `Sí, el contenido de la carta es verdadero. Es necesario avisar primeramente al Sumo Pontífice y enseguida al Obispo`.
Esta carta será acompañada de oraciones y ayunos para que el Espíritu Santo guíe vuestro espíritu y vuestro corazón en este importante período de la historia. Reciba nuestros homenajes en los Sagrados Corazón de Jesús y María.
Medjugorje, 2 de diciembre de 1983.
P. Tomislav Vlasic”.
(Del libro del P. René Laurentin. ¿La Virgen se aparece en Medjugorje?, Sección Documentos).
¿Qué pensaba San Juan Pablo II de Medjugorje?
Con ocasión del proceso de canonización de Juan Pablo II, el escritor Slawomir Oder [1] publicó la obra “Por qué es Santo, El Verdadero Juan Pablo II” (Ediciones B, s.a.) y en ella sacó a relucir algunos aspectos ignorados hasta el momento acerca de la opinión de Karol Wojtyla sobre Medjugorje. Textualmente escribe Oder:
«Su devoción por María se incrementó vivamente cuando se aclaró que el tercer secreto de Fátima hacía alusión al atentado de 1981. Muchos testigos de su entorno confirmaron que el Papa relacionaba este dramático suceso con las apariciones de la Reina de la Paz en Medjugorje, en la ex Yugoslavia, que habían empezado a producirse en junio de ese mismo año. Una ulterior confirmación de este vínculo fue, para los creyentes, el mensaje que dirigió a los fieles marianos el 25 de agosto de 1994, durante los días en que se preparaba el viaje pastoral del Papa a Croacia, previsto para los días 10 y 11 de septiembre, La Virgen María dijo: “Queridos hijos, hoy me uno a ustedes en la oración de una manera especial, rogando por el don de la presencia de mi amado hijo en su patria. Recen, hijos míos, por la salud de mi hijo predilecto, que sufre, pero al que yo he elegido para estos tiempos.”
Si bien jamás adoptaba una posición oficial cuando se producían dichas apariciones, el Papa no ocultaba en privado su convicción. A monseñor Murilo Sebastiáo Ramos Krieger, arzobispo de Florianopolis (Brasil), que estaba a punto de viajar, por cuarta vez al santuario de la Reina de la Paz, le confirmó: “¡Medjugorje es el centro espiritual del mundo!” En 1987, en el curso de una breve conversación, Karol Wojtyla hizo a la vidente Mirjana Dragicevic la siguiente confidencia: “Si no fuese Papa estaría confesando en Medjugorje.” Un deseo que corrobora el testimonio del cardenal Frantisek Tomasek, arzobispo emérito de Praga, quien le oyó decir que, de no haber sido Papa, le habría gustado ir a Medjugorje para ayudar a los peregrinos.
Aún más elocuentes son, a este propósito, las palabras que escribió el obispo de San Ángel (Estados Unidos), monseñor Michael David Pfeifer, en su carta pastoral fechada el 5 de agosto de 1988 a la diócesis: “Durante mi visita ad limina con los obispos de Texas, pregunté al Santo Padre qué opinaba de Medjugorje en el curso de una conversación privada. El Papa habló favorablemente de él y dijo: “Afirmar que en Medjugorje no ocurre nada significa negar el testimonio viviente y orante de los miles de personas que han estado allí.”
El 26 de marzo de 1984, un episodio que recordó el arzobispo eslovaco Pavel Hnilica, uno de los prelados más próximo al Pontífice. Una vez en que fue a comer con Juan Pablo II para ponerlo al corriente de una misión secreta que debía desempeñar en Moscú —celebrar clandestinamente la misa entre las murallas del Kremlin— éste le preguntó: “¿Después fuiste a Medjugorje, Pavel?” Cuando le dijo que no lo había hecho, dado que ciertas autoridades vaticanas le habían manifestado su desaprobación, el Papa le pidió: “Ve de incógnito y vuelve para contarme lo que has visto.» Después lo llevó a su biblioteca privada y le enseñó un libro del padre René Laurentin en el que figuraban varios mensajes de la Reina de la Paz mientras le comentaba: “Medjugorje es la continuación de Fátima, es la realización de Fátima.”
Tras la muerte de Juan Pablo II, sus amigos Marek y Zofia Skwarnicki pusieron a disposición las cartas que éste les había remitido y en las que abundaban las referencias a Medjugorje. El 28 de mayo de 1992, el Pontífice escribió a los cónyuges: ‘Agradezco a Zofia todo lo concerniente a Medjugorje. Yo también visito a diario ese lugar cuando rezo: me uno a todos los que oran allí y reciben desde allí la llamada a la oración. Hoy comprendemos mejor esta llamada.’” [2]
[1] Presbítero, polaco, graduado de Derecho Canónico, Economía y Comercio, subdirector de la oficina Legal del Vicariato de Roma, designado por el Cardenal Camilo Ruini, postulador de la canonización de Karol Wojtyla.
[2] SLAWOMIR, O. Porqué es Santo, El verdadero Juan Pablo II, 2010 Edición B, pp 167-169.